No tengas
prisa,
todo llega.
Ninguna sonrisa.
¿Por qué?
La madre de
tu madre,
es sabia.
Escucha,
el sonido del silencio.
¿Con quién?
No es
cierto.
Es tarde para darse cuenta,
no hay camino.
¡Espera!
¿A quién?
A que salga
el sol
por la mañana,
la lluvia moje tu cara,
las nubes te den alas.
¿Cómo?
Duerme,
no pienses,
un sueño,
tranquilo.
Piensa,
no duermas,
una pesadilla,
despierto.
Llama,
tranquilo hay mucha agua,
suficiente para las flores,
que albergan miles de colores.
Agua,
solo el de la lluvia.
Risa, ruido,
alas, sueño.
Sin camino aunque pongas empeño.
¿Cuándo?
En la
mañana,
al rodear la piedras el agua,
la luna refleje tu mirada,
tus entrañas escupan su rabia.
No tengas
prisa,
aliviara como la brisa.
No la veras llegar,
pero avisara
con su aletear.
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